Un joven de 24 años que fue intervenido en una fiesta COVID-19 en Cusco, contagió a sus padres, quienes presentaron un cuadro crítico por la enfermedad, lamentablemente su progenitor murió y su madre se encuentra en estado de gravedad.
Esta historia fue compartida por el fiscal de Prevención del Delitos de Cusco, Eduardo Poblete, quien hace dos semanas cuando se encontraba realizando operativos en discotecas y bares clandestinos que burlaban todas las medidas de bioseguridad contra el COVID-19.
En uno de estos establecimientos intervenidos, el fiscal comentó que un joven que no mostraba arrepentimiento por haber asistido a estas fiestas y reuniones prohibidas, se puso malcriado y acusó a las autoridades de ‘conspiracionistas’, haciendo alusión a que el virus no existía.
26 personas fallecen diariamente por COVID-19 en Cusco, cifra preocupante en lo que va del año, demostrando que la segunda ola está siendo bastante agresiva al sur del Perú y podrían tener relación con las nuevas variantes de esta enfermedad.