Efectivos de la Policía Nacional y representantes de Enel Perú intervinieron dos fábricas en el distrito de Puente Piedra, para desmontar conexiones eléctricas clandestinas que se utilizaban para operar industrialmente.
En el primer caso, Enel detectó que una fábrica de caucho, ubicada en la urbanización Fundo Chacarilla, hurtó aproximadamente 192,000 kilovatios-hora de electricidad, equivalente al consumo de 2,000 familias.
La energía hurtada equivale a S/ 100,000. Producto de esta conexión clandestina, el cable matriz que provee de energía a la zona tuvo un serio daño, ocasionado que seis clientes vean interrumpido su servicio.
Por otro lado, en la zona de La Ensenada, una fábrica de plásticos hurtó aproximadamente 140,000 kilovatios-hora de electricidad, además de afectar la calidad del servicio que reciben los vecinos. La energía hurtada equivale a S/ 45,000.