Inmortalizando la vida de quienes partieron por la pandemia

Daniel Manrique es un artista de 35 años, quien encontró en su profesión una forma de protestar en contra de la desobediencia e indiferencia de quienes a pesar de las exorbitantes cifras de infectados y fallecidos por coronavirus en el Perú, se creen inmunes frente al virus.

En un muro de 2 m x 2 m Daniel retrata los rostros de quienes lapandemia les arrebató la vida sin piedad, de todos los que sufrieron en su intento por aferrarse hasta el último segundo al mundo terrenal, sin ni siquiera recibir el último adiós de sus seres queridos. 

En 4 horas plasma el semblante de jóvenes, adultos y ancianos que perdieron la lucha contra la COVID-19. Es su forma de trasmitir un mensaje de responsabilidad y conciencia para que las personas cumplan con las medidas establecidas por el Gobierno peruano, que buscan frenar la propagación del virus. “Visibilizar las muertes, toca las fibras más sensibles del ser humano”, comenta.

Daniel ha dedicado más de 20 años al mundo delarte y hoy, en plena emergencia sanitaria ha inmortalizado en 6 retratos en murales y más de 15 en cartulina, la vida de quienes se sumaron a las escalofriantes estadísticas de víctimas mortales del coronavirus y no merecen ser olvidados. 

Él decidió ofrecer su talento de forma gratuita para pintar junto a su esposa Carla Magán (ambos integrantes del colectivo artístico Color Energía) y visibilizar desde el Cerro San Cristóbal, la peligrosa desobediencia que puede llevarnos hasta la muerte, arrebatarnos a un ser querido y destrozar a decenas de familias para siempre.

Sus retratos buscan sensibilizar a las personas sobre la mortalidad del virus y afirma que, una vez que todos entiendan la magnitud de lo que como humanidad estamos viviendo, está seguro que su mensaje a través del arte salvará vidas.

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