Un padre de familia se convirtió en la nueva víctima de la inseguridad ciudadana. José Elfer Fernández Gonzáles murió luego de ser baleado por delincuentes cuando trabajaba como repartidor de bizcochos.
La víctima de 31 años se encontraba por el sector de Las Delicias de Villa en Chorrillos cuando fue sorprendido por los hampones, quienes lograron arrebatarle un canguro con 40 soles, producto de la venta del día. Ellos le habrían disparado porque el monto les pareció muy poco.
El hombre fue ayudado por su primo, Marcos Cabanillas. Lamentablemente ninguna persona respondió a sus pedidos de socorro. La pérdida de sangre y valiosos minutos transcurridos hicieron que Fernández Gonzáles llegara cadáver al hospital María Auxiliadora.
El fallecido trabajaba para reunir dinero y apoyar en la compra de medicinas de su hija mayor, quien padece leucemia y se encuentra hospitalizada, según Correo.
