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Martes, 12 de setiembre del 2017

Sendero Luminoso: ¿qué significó para el país y por qué no debemos olvidar?

El grupo terrorista que desató el horror en el Perú por más de 12 años, causó la muerte de más de 30 mil personas. Todo bajo las órdenes de Abimael Guzmán.

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El grupo terrorista que desató el horror en el Perú por más de 12 años, causó la muerte de más de 30 mil personas. Todo bajo las órdenes de Abimael Guzmán.




Dolor, muerte, sangre y destrucción. Cuatro palabras que describen el terrible paso de Sendero Luminoso en la historia de nuestro país. Una época donde el horror se apoderó de todos los peruanos por la insanía de un grupo terrorista  que dejó más de 30 mil muertos durante casi dos décadas de violento accionar.

Pero, ¿cómo surge esta organización? Sendero Luminoso nació bajo el nombre oficial de Partido Comunista del Perú, una agrupación con ideología marxista, leninista y maoísta que pretendía instaurar un régimen revolucionario en nuestro territorio. Guiados por ese pensamiento, SL inició una lucha armada contra el Estado peruano el 17 de mayo de 1980, fecha en la que se desató el terror.

Desde entonces, el Perú entero quedó sometido a la violencia senderista. Terroristas atacaban a mansalva en todos los rincones del país, dejando miles de víctimas a su paso; entre ellos campesinos, dirigentes sindicales y autoridades elegidas por voluntad popular.

Su estrategia para sembrar terror era la extrema violencia. Atacaban puestos policiales, bancos e instituciones públicas y privadas. Detonaban coches bomba, volaban torres de alta tensión y colgaban perros en los postes con advertencias para la ciudadanía.

La lista de atentados realizados por el grupo terrorista es interminable. Pero quizá uno de los más recordados es la masacre de Lucanamarca, en Ayacucho, el 3 abril de 1983. Ese día, un total de 69 campesinos fueron brutalmente asesinados con hachas, machetes y cuchillos. La intención de los terroristas era amedrentar a las poblaciones para que no brinden su apoyo a las fuerzas del orden.

El atentado a la calle Tarata fue otro de sus sangrientos ‘trofeos’. Los terroristas detonaron dos coches bomba en pleno corazón de Miraflores el 16 de julio de 1992. 25 personas murieron y 155 quedaron heridas producto del brutal ataque. Periodistas y transeúntes fueron testigos de la magnitud del hecho.

Los dirigentes y líderes políticos tampoco escaparon de la crueldad de Sendero Luminoso. Orestes Rodríguez, ex ministro de Trabajo en el gobierno aprista, fue asesinado de cuatro balazos en la cabeza. El vehículo en el que viajaba junto a su hijo fue interceptado por tres senderistas el fatídico 22 de setiembre de 1990.

María Elena Moyano, una destacada luchadora y dirigente social en Villa el Salvador, también fue víctima del ensañamiento senderista. Ella fue asesinada frente a sus hijos el 15 de febrero de 1992, de varios disparos en el pecho. No contentos con ello, miembros de SL arrastraron su cuerpo y lo hicieron volar en pedazos con 5 kilos de explosivos. Su único ‘pecado’ fue enfrentarse al terrorismo y promover el nacimiento de las rondas campesinas.

De acuerdo a la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), la cifra total de víctimas fatales provocadas por Sendero Luminoso asciende a 31,331 personas. Hoy, esta organización terrorista, que continúa operando – aunque en menor medida – en el interior del país, es considerada responsable de gravísimos crímenes y numerosas violaciones a los derechos humanos.


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