La congresista Rosa Mavila está promoviendo un proyecto de ley que plantea considerar el acoso sexual callejero como un “delito autónomo”, que contemple severas sanciones para este tipo de casos suscitados en buses de transporte público.
La iniciativa propone pedir 4 años de cárcel para los infractores, pena que podría prolongarse hasta los diez años si la víctima es menor de 7 años.
Asimismo, se ha propuesto que los ‘piropos’ y palabras obscenas sean castigados con diez a treinta jornadas de trabajo comunitario.