El Departamento de Defensa de Estados Unidos, anunció con gran entusiasmo, el lanzamiento exitoso de la primera bomba guiada de 227 kilogramos contra un objetivo terrestre, realizada por el caza multifuncional estadounidense de quinta generación F-35.
Según explicó el Pentágono, durante las pruebas una bomba GBU-12 guiada por láser lanzada por el F-35, logró alcanzar un tanque en la base Edwards de la Fuerza Aérea, ubicada en el desierto de Mojave, California.
La GBU-12 Paveway II fue construida por las empresas Lockheed y Raytheon. Kyra Hawn, portavoz del proyecto del F-35, indicó que la bomba no llevaba explosivos, ya que son bastante costosos y la prueba tenía como objetivo asegurarse de que el avión es capaz de alcanzar con precisión un blanco terrestre.
El piloto del avión, Richard Rusnok, indicó que "las pruebas marcaron la primera vez que el F-35 se convirtió en un verdadero sistema de armas" y agregó que se trata de "otro paso adelante en el desarrollo de este importante programa".