El alcalde de la Municipalidad de Santa María de Huachipa, Miguel Málaga, anunció la clausura definitiva y reubicación del establecimiento, donde ayer se produjo un incendio que provocó el estallido de al menos 40 balones de GLP, que cayeron en diferentes viviendas del sector.
El funcionario indicó que pese a que no se registró pérdida de vidas humanas, al menos unas 35 familias se han visto perjudicadas. Por ello han pedido ayuda a las municipalidades de Lima y Chosica.
“Los vecinos piden traslado, reubicación y clausura. La licencia de funcionamiento fue otorgada antes de mi llegada como alcalde. A la espalda hay un colegio inicial y al costado un grifo. Gracias a Dios hoy ha sido feriado y no han estado los niños en el colegio”, remarcó.
Hasta el momento, peritos continúan con la búsqueda de pruebas que den un indicio de cómo se inició el siniestro. Por su parte, la empresa Pecsa Gas se comprometió a resarcir los daños provocados y pidió al burgomaestre la lista de los afectados.