La violación y asesinato de la la niña María Gimena de tan solo 11 años ha provocado dolor y lagrimas a todo un país cansado de tanta violencia en sus calles. Hoy un equipo de La Noche es Mía recorrió el lugar donde César Augusto Alva Mendoza vivía y se atrevió a perpetrar la masacre más cruel de los últimos tiempos en este país.
Para la doctora Carmen Gonzáles, presidenta de la Clínica de las Emociones, el 'Monstruo de la Huayrona' ha actuado como si fuera un animal, un depredador al acecho que buscaba captar a la pequeña.
En esta misma línea, el asesino ha sido sindicado por ser también una persona inmersa en el mundo de las drogas. Según la doctora, es probable aquella afirmación, pues el sujeto muestra signos que no lo catalogan como persona y eso tiene responde a los conflictos familiares.
Cabe señalar que los padres de la menor, han señalado que el sujeto tenía antecedentes policial, ya que registraba hasta ocho denuncias por violación sexual. Para la doctora, el 'Monstruo de Huayrona' se juntaba con la Policía porque así como él brindaba información, sentía que las autoridades lo protegerían de cualquier situación. De esta forma, nadie sospecharía de sus delitos.
Con respecto, a la actitud desafiante que mostró frente a la Policía, Carmen Gonzáles manifestó lo siguiente: "Cuando las personas están perturbadas, no tienen vergüenza, ni culpa. No miden la gravedad de lo que han hecho".
Finalmente, se sabe que este sujeto se ha declarado culpable y con su confesión, solo se espera que sobre él caiga todo el peso de la ley.