Este 1 de noviembre, miles de peruanos acudieron a los principales cementerios de Lima para celebrar el Día de Todos los Santos junto a sus difuntos. Y es que en esta fecha, los familiares los recuerdan con música, danzas, brindis, flores, globos, entre otros.
Tal es así que el cementerio Presbítero Maestro, uno de los más emblemáticos de la ciudad, reunió a cientos de personas que llegaron a visitar a sus difuntos en este día especial.
Este camposanto alberga a distintas personalidades; sin embargo, hay quienes sin ser una celebridad, han ganado popularidad y el reconocimiento de los fieles.
Es el caso del Niño Ricardito, símbolo del Presbítero Maestro, y a quien se le atribuye milagros para salvar a menores de edad. Por tal motivo, le dejan flores, cartas de peticiones, así como de agradecimientos en su estatua.
Dentro del necrópolis también existe un museo, donde se observan fotos de niños muertos en la zona de santos y que, precisamente, sus lápidas poseen la misma imagen.
Por otro lado, también es sede de la cripta del compositor criollo Felipe Pinglo Alva, cuyas rejas tienen una lira con pentagramas en referencia a su canción más conocida, El Plebeyo.
De igual forma, se aprecia la Cripta de los Héroes que alberga 297 defensores de diferentes batallas y fue hecha para conmemorar a los caídos de la Guerra del Pacífico. Acá están los restos de Miguel Grau, Francisco Bolognesi, Andrés Avelino Cáceres, Pedro Ruíz Gallo, Alfonso Ugarte, etc.
Saliendo del Presbítero Maestro, cruzando la avenida se ubica el cementerio El Ángel. Este fue inaugurado el 27 de junio de 1959 y es propiedad de la Municipalidad de Lima.
Cabe señalar que en este lugar está la tumba de uno de los personajes más populares del Perú. Se trata de Augusto Ferrando, quien permanece junto a su esposa cerca al cuartel San Bartolomé.
En este mismo marco, el público en general llega al cementerio El Ángel para conocer la tumba de referentes de la música criolla, como Chabuca Granda y Lucha Reyes.