Imagina a los barrios más peligrosos del Callao unidos por la paz. La Ley de la Calle estuvo con una asociación de jóvenes que logró lo imposible: juntar Loreto, San Judas, La Siberia, Atahualpa y Chacaritas para llevar a sus niños a que se conozcan y cambien por un balón todas las balas disparadas en su comuna.
Zonas que estuvieron enfrentadas durante años se reunieron con la idea de integrar a su infancia, juventud y adultez para encontrar la paz y la solidaridad en el Callao. Ahora quieren cambiar todas las desagradable etiquetas que recibieron de otros distritos cercanos al puerto.
La asociación de jóvenes Acredepuc recibió el apoyo de las autoridades para la realización de actividades como juegos de integración y un campeonato de fulbito para los más chicos. La idea es cambiar la mala imagen que alguna vez tuvo el primer puerto del Perú por una comuna sana, manteniendo esa picardía que caracteriza los barrios del Callao.