Análisis de ADN demostraron que el austriaco Josef Fritzl, quien abusó de su hija y la mantuvo confinada en un sótano sin ventanas durante 24 años, es el padre de los hijos de ella, dijo la policía el martes.
Fritzl confesó el confinamiento de su hija Elisabeth en el sótano de su casa de dos pisos y que engendró con ella siete hijos, de los cuales seis están vivos.
Fiscales dijeron que estaban investigando a Fritzl por la muerte del séptimo hijo, por lo que podría enfrentarse a la acusación de asesinato del niño por negligencia.
"Los resultados (...) muestran que los seis hijos, que la desdichada Elisabeth Fritzl dio a luz en el sótano, han sido todos sin lugar a dudas engendrados por su padre, Josef Fritzl, que ahora tiene 73 años," dijo Franz Polzer, jefe de la unidad de investigación criminal en la región Baja Austria, en una conferencia de prensa.
La policía dijo que Fritzl admitió haber incinerado el cuerpo del séptimo hijo cuando murió poco después de nacer.
"Josef F. está siendo investigado por asesinato por negación de asistencia," dijo el jefe la fiscalía local, Peter Ficenc, a Reuters.
Las pesquisas también se centraban en los delitos de violación, incesto y coacción, agregó.
Investigadores están registrando el sótano de 60 metros cuadrados construido debajo de la casa de dos pisos del ingeniero eléctrico Fritzl, dijo Franz Prucher, director de seguridad en la Baja Austria.
"Allí abajo hay sólo caos en este momento. Tenemos que pasar por cada detalle muy cuidadosamente," expresó Prucher a Reuters.
Fritzl se presentó el martes ante un juez en St Poelten, la capital provincial de Baja Austria, quien ordenó que la policía lo mantenga detenido mientras continúan las investigaciones.
Funcionarios dijeron que Fritzl no hizo declaraciones en la audiencia, siguiendo el consejo de su abogado.
Guenther Moerwald, director de la prisión de St Poelten, dijo que Fritzl estaba tranquilo cuando se presentó el lunes y que fue puesto en una celda donde puede ser monitoreado para garantizar que no intente suicidarse.
Elisabeth Fritzl, de 42 años, dice que su padre la llevó engañada al sótano de su casa en 1984, y la drogó y esposó antes de recluirla.
Tres de sus hijos, de 19, 18 y 5 años, estuvieron encerrados en el sótano con ella desde su nacimiento y nunca habían visto la luz del sol. Los dos menores son varones y la mayor, una mujer.
Otros tres niños, dos mujeres y un varón, fueron adoptados y criados por Fritzl y su esposa, Rosemarie.
El caso salió a la luz pública cuando la hija de 19 años se enfermó y fue trasladada al hospital. Los doctores pidieron que acudiera su madre para dar detalles sobre su historia clínica.
El doctor que está tratando a la joven, Albert Reiter, dijo el martes que su condición era crítica y que su coma inducido artificialmente continuaría por varios días más.
"Nuestra paciente está en condición de riesgo severo para su vida, resultante de una falta de oxígeno causada en algún momento entre el miércoles y el viernes, cuando ingresó," explicó Reiter a la cadena alemana N24.
"Además de los 20 años en un sótano, 20 años sin la luz del sol, 20 años de estrés psicológico, hay otros factores de infección," agregó, al comentar el pronóstico de la joven.
El caso ha conmocionado Austria, menos de dos años después de que la adolescente austriaca Natascha Kampusch escapara de un sótano donde había sido mantenida encerrada por un secuestrador durante ocho años.
"Hay un millón de preguntas sin responder," dijo el investigador Polzer a Reuters. "¿Cómo consiguió vivir con lo que había hecho? ¿Cómo engañó a todos?," agregó.
Polzer afirmó que no culpa a las autoridades por no haberse percatado del caso. "No he estado en conocimiento de ningún error de su parte," comentó.
"Fritzl fue un hombre muy astuto. No sólo engañó a su esposa, sino también a los funcionarios, la policía, a todos," añadió.