China ha detenido el envío de tierras raras al extranjero tras el aumento de tensiones con Estados Unidos. La medida responde a los aranceles impuestos por Washington, que ya suman un 145 % sobre productos chinos.
La medida, que busca proteger sus intereses estratégicos, impacta directamente en sectores clave como defensa, energía y automoción. Beijing reforzó los controles estatales, limitando la salida de minerales esenciales.
La tensión se intensificó el 4 de abril, cuando Washington anunció nuevos aranceles del 34 % sobre productos chinos. En respuesta, China activó una lista de control que exige licencias especiales para exportar elementos como samario, lutecio o disprosio, paralizando de manera inmediata los envíos internacionales.
Expertos advierten que las consecuencias no serán inmediatas, pero sí inevitables cuando se agoten las reservas actuales. Estados Unidos, uno de los mayores compradores, enfrentará dificultades para hallar nuevos proveedores rápidamente. La medida podría afectar gravemente a fabricantes de tecnología, autos eléctricos y dispositivos médicos.
CHINA EL PRINCIPAL PRODUCTOR DE TIERRAS RARAS EN EL MUNDO
China produce alrededor del 90 % de las tierras raras a nivel mundial, lo que les otorga una ventaja estratégica frente a sus rivales. Estos minerales son fundamentales para tecnologías avanzadas, desde sistemas militares hasta productos electrónicos.