El estado de salud del papa Francisco sigue generando preocupación en la Iglesia católica. Tras ser internado por una infección respiratoria, el Vaticano confirmó que el cardenal portugués José Tolentino de Mendonça asumió la celebración de la misa dominical en su ausencia. Sin embargo, la Santa Sede enfatizó que el poder papal solo cambia de manos en caso de fallecimiento o renuncia.
¿QUIÉN ASUME LAS FUNCIONES DEL PAPA FRANCISCO?
Según los protocolos del Vaticano, un período breve de internación o enfermedad del papa no altera el funcionamiento de la Curia, ya que las decisiones administrativas siguen a cargo de los funcionarios designados. Sin embargo, ante la prolongación de su estado de salud, el cardenal José Tolentino de Mendonça ha sido designado para presidir ceremonias litúrgicas en su lugar.
A pesar de su hospitalización, el papa Francisco sigue al tanto de los asuntos de la Iglesia. No obstante, debido a su delicado cuadro clínico, su agenda ha sido suspendida y se aplicó la regla del “absoluto reposo” indicada por los médicos.
¿QUÉ PASA SI EL PAPA NO PUEDE CONTINUAR CON SU MANDATO?
El derecho canónico establece que, en caso de fallecimiento o renuncia del papa, se activa un protocolo conocido como "interregnum". Durante este período, el camarlengo de la Iglesia, actualmente el cardenal Kevin Farrell, asumiría temporalmente la administración del Vaticano hasta la elección de un nuevo pontífice mediante un cónclave.
Sin embargo, el canon 335 del derecho eclesiástico deja abierta la interpretación sobre qué significa que la Santa Sede esté "totalmente impedida", lo que ha generado debate sobre posibles escenarios en caso de que la enfermedad del papa Francisco se prolongue. Por ahora, el Vaticano mantiene en reserva cualquier decisión sobre su futuro, mientras el sumo pontífice continúa en tratamiento.