En una importante operación aduanera en Estados Unidos, agentes de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) confiscaron más de 3,000 guitarras eléctricas falsificadas de la marca Gibson. Estos instrumentos, enviados desde Asia, tenían un valor estimado de venta de más de 18 millones de dólares si hubieran sido genuinos.
Las guitarras falsificadas, que imitan a los icónicos modelos de Gibson, fueron diseñadas para engañar a consumidores desprevenidos que suelen adquirir estos productos en internet, mercados callejeros o minoristas no autorizados. Cheryl M. Davies, directora de operaciones de CBP en Los Ángeles, advirtió sobre el riesgo de estas compras, especialmente en la temporada navideña
“Si es demasiado bueno para ser verdad, probablemente lo sea”, señaló a los medios de comunicación.
La compañía Gibson, fundada en 1894 y con sede en Nashville, Tennessee, confirmó que las guitarras incautadas eran falsificaciones. La marca destacó que sus productos auténticos se fabrican exclusivamente en Estados Unidos, de forma artesanal, en instalaciones de Nashville y Bozeman, Montana.
Además del daño a la reputación de Gibson, estas guitarras falsas representan un riesgo para los consumidores. Los instrumentos están hechos con materiales de calidad inferior y en condiciones de fabricación no reguladas, lo que puede comprometer la salud y seguridad de los usuarios.
El CBP hizo un llamado a los compradores a ser cautelosos al adquirir guitarras y otros productos de marcas reconocidas. Recomendaron comprar solo en distribuidores autorizados y estar atentos a señales de fraude, como precios sospechosamente bajos.