En el marco de la cumbre del G20 en Brasil, los presidentes de China, Xi Jinping, y Argentina, Javier Milei, sostuvieron su primer encuentro bilateral, marcado por la decisión de fortalecer la relación comercial entre ambas naciones.
Este encuentro ha sido interpretado como un cambio significativo en la política exterior de Milei, quien previamente criticó al régimen chino y descartó trabajar con "comunistas".
La reunión y su impacto en la relación bilateral
Durante la reunión, ambos líderes discutieron temas clave para la relación bilateral, incluyendo el comercio y proyectos de cooperación conjunta.
“China expresó su interés en incrementar el comercio con Argentina, mientras que Argentina manifestó su voluntad de diversificar y aumentar sus exportaciones al mercado chino”, señala un comunicado oficial de la Presidencia argentina.
Además, Milei y Xi intercambiaron invitaciones para realizar visitas oficiales a sus respectivos países, con la intención de profundizar la relación entre ambas naciones. Por su parte, Xi Jinping destacó el décimo aniversario de la Asociación Integral entre China y Argentina, subrayando la importancia de continuar con los logros alcanzados y explorar nuevas oportunidades.
Un giro pragmático en la política de Milei
El encuentro supone un cambio estratégico para Milei, quien anteriormente había descartado a China como socio relevante. En 2023, el entonces candidato a la presidencia declaró: “Nosotros no hacemos pactos con comunistas”.
Sin embargo, el contexto económico y las importantes inversiones chinas en Argentina, como las represas hidroeléctricas en Santa Cruz y la estación satelital en Neuquén, han llevado al presidente argentino a optar por el pragmatismo.
China es actualmente uno de los principales socios comerciales de Argentina, y su participación en el financiamiento de infraestructura estratégica, incluida la adhesión argentina a la Franja y la Ruta de la Seda durante el gobierno de Alberto Fernández, destaca la relevancia del vínculo.