El alza de número de divorcios en China ha dado lugar a un nuevo y curioso tipo de negocio: la destrucción de recuerdos de parejas separadas. Ante el incremento de las rupturas matrimoniales, emprendedores como Liu Wei han encontrado una oportunidad en la necesidad de las exparejas de eliminar todo rastro de su vida en común, ofreciendo un servicio para deshacerse de fotos, videos, cuadros y otros objetos simbólicos.
AUMENTAN LOS DIVORCIOS EN CHINA
La tasa de divorcios en China ha ido en aumento en los últimos años, alcanzando un pico de 4.7 millones en 2019, frente a los 2.4 millones registrados una década antes. Al mismo tiempo, el número de matrimonios ha disminuido drásticamente, pasando de 13 millones en 2013 a menos de 7 millones en 2022, según cifras oficiales.
Liu Wei, propietario de una fábrica en Beijing, comentó a CNN que su negocio ha prosperado gracias a esta creciente demanda. Aunque la cultura china tradicionalmente considera de mala suerte destruir o quemar fotografías, cada vez más personas ignoran este estigma y buscan cerrar definitivamente sus relaciones pasadas.
“Un divorcio no tiene por qué ser algo malo. Puede ser algo bueno. Así que no hay necesidad de sentirse triste por ello”, explicó Liu Wei, quien cobra entre 8 y 28 dólares por cada encargo. Desde que lanzó su servicio en 2021, ha destruido los recuerdos de unas 2500 parejas.
