El vórtice polar es una vasta corriente de aire de frío que rodea al Ártico, sin embargo, este fenómeno ha sufrido una importante alteración a principios de marzo, por la que gira al contrario de su habitual movimiento, es decir contrario a las agujas del reloj.
Este fenómeno no es nuevo y el cambió de dirección de su vórtice no es inusual, pero su magnitud es lo que ha llamado la atención de los científicos.
El cambio de dirección del vórtice se debe a un inesperado calentamiento atmosférico, el cual provoca que los vientos se desplacen hacia el este, lo que lleva a los científicos a evaluar las posibles repercusiones sobre el clima en los siguientes meses.
Históricamente, los cambios en este sistema han sido responsables de descensos de temperatura extremos y tormentas severas en vastas regiones de Estados Unidos. Pero, la situación actual no parecería indicar un próximo evento de enfriamiento extremo similar, pero sí ha surgido una consecuencia directa en el incremento récord en los niveles de ozono sobre el Polo Norte.
DATOS RELEVANTES
Según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) este evento ha sido calificado como una de las seis inversiones más pronunciadas registradas desde 1979, y enfatizó su carácter excepcional.
La NOAA indicó que la inversión de marzo se debe al calentamiento súbito de la estratósfera, fenómeno estimulado por las ondas de Rossby, que, al ejercer presión hacia arriba, debilitan el vórtice y dispersan el aire frío. En estos casos, las temperaturas estratosféricas pueden descender hasta 50 grados Celsius.