En un suceso impactante ocurrido el 7 de enero, un niño en Pensilvania demostró valentía al enfrentar una situación de violencia doméstica, disparando a su padre para proteger a su madre y hermana.
Tracey Adams, de 47 años, inició una discusión que escaló a agresiones físicas contra su esposa e hija, llevando a las mujeres a abandonar el lugar y refugiarse en la casa de la hijastra, Brandi Hauck, de 31 años, donde se encontraba el niño.
Adams las persiguió y, al llegar, fue impedido de ingresar por la dueña de la casa. En respuesta, sacó un arma y trágicamente acabó con la vida de la joven Hauck.
Sin obstáculos, Adams intentó ingresar al domicilio para atacar al resto de la familia. En un acto de valentía, el menor tomó una pistola disponible en la casa y disparó hacia su padre, evitando una tragedia mayor.
ACTUÓ POR DEFENSA PROPIA
La policía respondió a un informe de disparos en Dalmatia, Pensilvania, encontrando los cuerpos de Adams y Hauck. El informe pericial posterior confirmó que el niño actuó en legítima defensa, y no se presentaron cargos en su contra.
El abogado distrital, Michael O'Donnell, destacó que las acciones del niño fueron justificadas y previnieron posibles muertes o lesiones en la casa, clasificando el caso como un doble homicidio.
(Con información de Diario Perú21)
