En una reciente conferencia realizada en el teatro del Instituto Francés de Madrid, el astronauta Thomas Pesquet, representante de la Agencia Espacial Europea, ofreció una visión detallada de lo que significa vivir en la Estación Espacial Internacional (EEI).
El astronauta, Pesquet, que fue parte de la Expedición 50 junto a sus colegas Peggy Whiston y Oleg Novitskiy, compartió sus experiencias y desafíos únicos de la vida en el espacio. Desde el año 2000, la EEI ha recibido a numerosos astronautas de diversas nacionalidades.
La vida en la estación está llena de investigaciones científicas, cambios de equipos, reparaciones, exploración espacial y entrenamiento físico para contrarrestar la pérdida de masa muscular y ósea causada por la gravedad cero.
LAS LEYES DE LA FÍSICA EN EL ESPACIO
Pesquet y sus compañeros de tripulación dedican su tiempo a estudiar cómo funcionan las leyes de la física en el espacio y a prepararse para un futuro hipotético en el que la humanidad pueda establecerse fuera de la Tierra. "Aunque nos encanta nuestro trabajo, no estamos aquí solo para disfrutar", afirmó Pesquet.
El astronauta también habló sobre el desafío de adaptarse a la vida en la Tierra después de pasar tiempo en el espacio. "Cuando regresas, tienes que reaprender a hacer cosas cotidianas que sabes hacer en la Tierra, pero no en el espacio: comer, beber, lavarte, dormir... tienes que desaprender todo y empezar de cero", explicó.
La vida en el espacio presenta desafíos únicos. La basura generada en la EEI se desintegra en su mayoría debido a la fricción con la atmósfera terrestre. En cuanto a la alimentación, se les envía fruta fresca por cohetes cada mes y medio, y han logrado cultivar lechugas en armarios especialmente diseñados para ello.
Las salidas al espacio no son una actividad diaria, pero sí son habituales. "Siempre estamos sujetos por una cuerda de seguridad, como los escaladores, y siempre debemos estar atentos a que no se formen nudos", compartió Pesquet.
PREPARADOS ANTE CUALQUIER SITUACIÓN
Estas salidas se planifican con tres semanas de anticipación y, debido a la velocidad con la que se mueven, pueden perder las referencias de su ubicación. En caso de emergencia, los astronautas están preparados para enfrentar cualquier situación. Han recibido capacitación en supervivencia, primeros auxilios y preparación física.
Si la situación es urgente, pueden regresar a la Tierra en 24 horas. Además, siempre tienen una nave acoplada a la EEI para casos de evacuación de emergencia. Pesquet también habló sobre los efectos del espacio en el cuerpo humano. "Vuelves mal, agotado, con ganas de vomitar, mareado... Estar en el espacio seis meses equivale a envejecer diez años en la Tierra", expresó.
Sin embargo, aclaró que este envejecimiento es reversible y que se están realizando estudios para entender los límites del cuerpo humano y evaluar la viabilidad de viajes a Marte.
