Roxana Ruiz, una mujer de 23 años, fue condenada a 6 años y 2 meses de prisión por el homicidio del hombre que la violó. La jueza Mónica Palomino, del Poder Judicial del Estado de México, determinó que la joven es culpable de “uso excesivo de la legítima defensa”, a pesar de haber sido víctima de abuso sexual. La magistrada ha generado indignación en la población mexicana al afirmar que con “un golpe en la cabeza” era suficiente para defenderse.
“Me siento triste, decepcionada de la justicia”, dijo Ruiz al salir de la audiencia. “Si yo no me hubiera defendido, estaría muerta”, declaró a medios locales.
Asimismo, se le impuso una multa de reparación del daño material de 196.267 pesos y una reparación del daño moral de 89.620 pesos para la familia del agresor.
El abogado de la afectada ha impugnado la pena, por lo que Ruiz no entrará a prisión hasta que se resuelva el amparo. No obstante, ella ya estuvo encerrada durante nueve meses a la espera del juicio en su contra.
En una entrevista con El País, la joven madre dijo que temía por su futuro y el de su hijo de 5 años: “Siento tensión en el pecho porque no quiero regresar a la cárcel”, dijo en agosto del año pasado.
Roxana Ruíz es una mujer indígena originaria de Oaxaca, quien viajó al centro de México con la aspiración de mejorar sus condiciones de vida, pero en mayo del 2021 fue ultrajada por un sujeto en su propia casa, a quien terminó matando luego de defenderse.
Aunque había actuado en defensa propia, Ruiz cuenta que las autoridades no tomaron en cuenta su testimonio. “Insistí en que fui violada, pero nunca me realizaron pruebas (...), no tomaron fotografías, no tomaron en cuenta mi declaración”, escribió en una carta cuando se encontraba recluida en el centro penitenciario Bordo de Xochiaca.