Un sujeto asesinó al menos a ocho personas, entre ellas niños, y ha dejado a otras siete heridas, tres de ellas graves, en el tiroteo registrado la tarde de ayer en un concurrido centro comercial de Allen, una localidad de las afueras de Dallas, Texas, EEUU.
Según las autoridades, el atacante también ha muerto, abatido por un agente de policía. El tiroteo comenzó en el centro comercial Allen Premium Outlets en momentos en los que el complejo de tiendas se encontraba muy concurrido por familias.
Pudo ser peor
Testigos relatan que el autor de los disparos baja de un vehículo que deja abierto en medio de un aparcamiento, y comienza a abrir fuego de manera indiscriminada. El ruido de los disparos hizo que cientos de personas echaran a correr para abandonar el lugar.
El ataque pudo dejar más muertos y heridos, pero un agente de la policía que se encontraba en la zona actuó inmediatamente, al escuchar los disparos que procedían del centro comercial, fue al lugar y se enfrentó al sujeto, neutralizándolo rápidamente.
