La reina británica Isabel II, de 95 años, pasó la noche del miércoles en un hospital en donde se sometió a exámenes médicos preliminares, luego de que los doctores le pidieron "guardar reposo", informó el Palacio de Buckingham.
"Siguiendo el consejo médico de descansar unos días, la reina acudió al hospital el miércoles por la tarde para realizar unos exámenes preliminares, regresó al castillo de Windsor hoy a la hora del almuerzo y se mantiene de buen humor", informaron las fuentes.
La monarca de 95 años regresó a Windsor, a las afueras de Londres, y según indicaron, estaba "decepcionada" por haber cancelado una de sus actividades en su apretada agenda como la visita a Irlanda del Norte el miércoles. Ahora se encuentra llevando a cabo tareas ligeras", como atender documentos oficiales, telegramas del Ministerio de Asuntos Exteriores o correspondencia.
