Al menos 15 misioneros estadounidenses fueron secuestrados, la tarde de ayer, por una banda criminal en la periferia de Puerto Príncipe, capital de Haití. Hasta el momento se desconoce si los captores pidieron un pago de rescate.
En tanto, en un escueto comunicado, un portavoz del Gobierno estadounidense señaló que ya conocen de esta situación y que el bienestar de sus ciudadanos es una de sus principales prioridades de la actual gestión.
“El bienestar y la seguridad de los ciudadanos estadounidenses en el extranjero es una de nuestras principales prioridades en el Departamento de Estado. Conocemos esta información y no tenemos nada que agregar por el momento", indicó a AFP.
Las bandas armadas, que controlan importantes sectores de las regiones más pobres de Haití, en los últimos años, han extendido su poder a Puerto Príncipe y sus alrededores, donde el número de secuestros extorsivos está en aumento.