Una niña de nueve meses de edad murió cuando sus padres, inmigrantes de nacionalidad venezolana, intentaban cruzar la frontera entre Bolivia y Chile, por un paso clandestino. Según se conoció, la bebé es la decimoquinta migrante que muere en la agreste zona.
El hecho ocurrió en la localidad boliviana de Pisiga cuando la madre tropezó y la niña cayó golpeándose la cabeza contra el suelo, le menor perdió el conocimiento. Inmediatamente, la mujer tomó a la niña y cruzó a pie unos tres kilómetros por la frontera hasta el poblado chileno de Colchane donde los médicos solo pudieron confirmaron el deceso de la menor.
Según autoridades chilenas, el sábado murieron otras dos personas y ya son 15 los migrantes (venezolanos, colombianos y haitianos) fallecidos este año en las inmediaciones de Colchane, localidad ubicada a 3,650 metros de altitud en la región de Tarapacá.
Estos sucesos se registran en medio de un aumento del flujo de inmigrantes que intenta cruzar por pasos clandestinos, desafiando las extremas temperaturas del altiplano con el fin de buscar una mejor vida en Chile, que mantiene sus fronteras cerradas por la pandemia de la Covid-19, informa Correo.