En Afganistán, las fuerzas militares de los Estados Unidos lanzaron un segundo ataque aéreo contra la filial del autodenominado Estado Islámico (EI-Khorasan), en represalia por el doble atentado del pasado 26 de agosto, donde perdieron la vida más de 170 personas, incluidos 13 militares estadounidenses.
Este operativo se produce en momentos en que el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai, en Kabul, sigue siendo escenario de un puente aéreo masivo por parte de las fuerzas estadounidenses
Según la milicia estadounidense, la operación tuvo como objetivo un vehículo que transportaba "múltiples terroristas suicidas" y ocurrió antes de que pudieran atacar de nuevo el aeropuerto de Kabul.
Cabe señalar que Washington confirmó que llevó a cabo el bombardeo en una operación que fue llevada a cabo por un avión no tripulado pilotado desde fuera de Afganistán.
