Gran conmoción ha causado el asesinato de una madre de familia en Francia. Una mujer de 31 años fue baleada y luego quemada viva por su expareja en plena vía pública. El horrendo crimen ocurrió en un barrio de la ciudad de Mérignac, cerca de Burdeos.
Según los medios locales, el atacante disparó varias veces contra la víctima que trataba de huir por una calle. Las balas le cayeron a la altura de la rodilla lo que provocó que quede inmovilizada. Seguidamente el sujeto le roció gasolina y le prendió fuego cuando todavía estaba con vida.
El autor del asesinato fue detenido media hora después en una localidad vecina. En su poder se halló un rifle y municiones. Se conoció que la expareja se encontraba separada desde hace varios meses. Sus hijos de tres, siete y once años vivían con la madre.
CRUEL DESENLACE:
Los vecinos de la víctima expresaron su consternación por lo ocurrido. “Había encontrado la fuerza de separarse en la primavera pasada, cuando su marido fue condenado por haberla golpeado nuevamente. Pero salió de la cárcel en septiembre u octubre. Desde entonces la acosaba, la espiaba, la perseguía”, contó un vecino al diario Sud-Ouest.
“Hace unos dos meses la volvió a agredir a la salida de un supermercado. Logró hacerla subir a su camioneta e intentó estrangularla. Pero ella logró huir”, añadió.
