Internacionales

Sábado, 23 de setiembre del 2006

Investigan accidente del Transrapid en Alemania

Personal de la sala de control a cargo de la vía donde un tren de suspensión magnética chocó y causó la muerte de 23 personas no pudo ver en sus computadoras o sistemas de video el vagón de mantenimiento de 60 toneladas que fue impactado por el convoy, dijo el sábado un fiscal.

Investigan accidente del Transrapid en Alemania

Personal de la sala de control a cargo de la vía donde un tren de suspensión magnética chocó y causó la muerte de 23 personas no pudo ver en sus computadoras o sistemas de video el vagón de mantenimiento de 60 toneladas que fue impactado por el convoy, dijo el sábado un fiscal.




El personal usó una inspección directa y por radio de la vía elevada de 32 kilómetros de largo, para asegurarse que era transitable, dijo Alexander Retemeyer, portavoz de los fiscales investigadores a cargo del caso. ``Solamente puede ser declarada segura por contacto visual y radial'', dijo. Retemeyer, fiscal en la cercana localidad de Osnabrueck, dijo que las investigaciones del accidente del viernes se centrarían en la posibilidad de errores humanos y lo que pasó en el centro de control, donde se encontraba trabajando el mínimo de dos empleados requeridos al momento del accidente, ocurrido a las 9:30 de la mañana. Se negó a expresar si alguien estaba siendo interrogado. El vagón de mantenimiento, de 10 metros de largo, usa neumáticos en lugar del campo magnético que permite la suspensión y movimiento del tren, y en consecuencia no es visible en el sistema de computadoras que indica la posición del tren. Tampoco pudo ser visto en las cámaras de video en la zona donde ocurrió el accidente, aunque evidentemente era visible en las condiciones en que ocurrió el siniestro. ``Muchos puntos en la vía son vigilados por cámaras de video'', dijo Retemeyer a la prensa en el centro de visitantes de la instalación, empleado para dar a conocer su tecnología. ``Pero el lugar donde ocurrió el accidente no tenía vigilancia por video'', dijo. El vehículo de mantenimiento fue golpeado por el tren de plástico y aluminio, de construcción ligera para que pueda levitar, a 200 kilómetros por hora, y fue lanzado por los aires, arrancando el techo del primer vagón y lanzando asientos, vidrios y metales retorcidos en los alrededores de la vía de cuatro metros de altura. El tren, que es guiado por una vía magnetizada, no descarriló. (Agencias)

También te puede interesar:

DENGUE