Desde los Estados Unidos, el presidente electo Joe Biden, como uno de sus primeros actos oficiales se ha comprometido a reafirmar el compromiso de su nación con los refugiados después de la reducción drástica de las medidas antiinmigración de Donald Trump.
El actual mandatario redujo el límite de las admisiones de refugiados todos los años de su presidencia y para el 2021, estableció el límite en 15.000 refugiados, mientras que en 2016, el expresidente Barack Obama tenía como objetivo admitir a 110.000 refugiados.
Con esta nueva medida, Biden promete adoptar un enfoque totalmente diferente al de su predecesor, estableciendo un límite anual de admisiones de refugiados a 125.000 y tratar de aumentarlo con el paso del tiempo.
