En Botswana sigue siendo un misterio por resolver el motivo por el cual han fallecido más de 300 elefantes. El Ministerio de Medio Ambiente, Recursos Naturales, Conservación y Turismo de esa nación ha indicado en un comunicado que hasta el momento se han identificado 275 cadáveres, si bien ha reconocido que hay informaciones que apuntan a la muerte de 356 animales.
“Las investigaciones en torno a las muertes no explicadas de elefantes siguen en marcha”, ha indicado, al tiempo que ha agregado que se han enviado muestras a laboratorios en Canadá, Sudáfrica y Zimbabue.
También a otros elefantes vivos se les ha visto con problemas de orientación y signos de parálisis.
Cabe indicar que la asociación Elefantes sin Fronteras ha exigido medidas urgentes para descubrir si las muertes han sido causadas por enfermedad o intoxicación.