En Israel, la basílica de la Natividad de Belén, el presunto lugar de nacimiento de Jesús de Nazaret, según la tradición cristiana, reabrió tras estar cerrada más de dos meses a raíz de la pandemia del nuevo coronavirus COVID-19.
Un puñado de sacerdotes de diferentes confesiones cristianas observaron la apertura de la puerta de la basílica en esa ciudad de Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel. En una breve ceremonia, los eclesiásticos sostuvieron la llave del edificio antes de entrar para rezar, seguidos por algunos fieles devotos.
En un principio, sólo 50 personas podrán ingresar al templo al mismo tiempo y los visitantes deberán utilizar una mascarilla y respetar el distanciamiento físico, según un comunicado conjunto de las iglesias que controlan el lugar.
Cabe indicar que besar o tocar las rocas, incluyendo las de la gruta donde los cristianos creen que nació Jesús, estará prohibido.