En Bielorrusia, dos jóvenes de 19 y 21 años de edad fueron condenados a muerte tras asesinar a su profesora de al menos 100 puñaladas.
Los hermanos asesinaron a su maestra en su domicilio, presuntamente, bajo los efectos del alcohol y posteriormente incendiaron el hogar de la víctima.
Los ejecutados fueron identificados como Stanislaw Kostsew y Illya, ambos fueron hallados culpables por la justicia bielorrusa de apuñalar al unas 100 veces a su profesora.
Bielorrusia es el único país europeo en el que permanece la pena capital, y desde el mandato de Akexánder Lukashenko en 1994, desde entonces se han registrado más de 400 ejecuciones.