En Tailandia, un delincuente sufrió una dura caída mientras trataba de saltar un muro para ingresar a una vivienda. Alertada por los ladridos de un perro, la dueña del inmueble filmó al intruso, quien finalmente abandonó el lugar.
Luego de trepar la pared, el hombre intentó bajar dentro de un patio, pero en ese momento perdió la estabilidad y cayó al suelo sin ninguna protección, golpeando su rostro contra el pavimento. El ladrón quedó inmóvil boca abajo, aunque posteriormente logró darse vuelta y ponerse en pie.
Fue entonces que la dueña de la vivienda le gritó, tras lo cual el hombre saltó nuevamente el muro y escapó del lugar.
La dueña de la casa informó a los medios internacionales que se encontraba feliz de que el supuesto delincuente cayera y se lastimara, pues eso le impidió seguir su plan.