Estados Unidos sancionó hoy a Rafael Ortega Murillo, hijo del presidente de Nicaragua, y a dos empresas que dirige, por “lavado de dinero” para financiar el gobierno de su padre, Daniel Ortega.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, dijo que la nueva acción “promueve el compromiso de Estados Unidos de utilizar todas las herramientas económicas y diplomáticas para responsabilizar al gobierno de Daniel Ortega por actos de corrupción y violaciones de derechos humanos”.
Asimismo, el comunicado señaló que “insta al régimen de Ortega a reanudar el diálogo con la oposición y restablecer la democracia en el país” para que cumpla con ello “las obligaciones bajo la Carta Democrática Interamericana”.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) acusa a Rafael Ortega de enriquecerse con una distribuidora de gasolina y una compañía de seguridad, a las cuales adjudicaban millonarios contratos gubernamentales en los que no se admitía competencia.
