A pesar de las promesas de reducción de emisiones, los gases que generan el efecto invernadero y que a su vez son causantes del cambio climático, alcanzaron nuevamente cifras récord en 2018, así lo dio a conocer la Organización Meteorológica Mundial (OMM), advirtiendo que a este ritmo el calentamiento global tendrá consecuencias cada vez más devastadoras.
Este organismo dependiente de la ONU, indicó en su informe anual que la concentración media mundial de dióxido de carbono (CO2) alcanzó las 407,8 partes por millón en 2018, lo que representa un 0,56% más que en 2017.
Esto supone una concentración de 147% de la que se registró en niveles preindustriales (de 1750), además de una subida anual mayor a la media de los últimos 10 años, según las observaciones de la Red de Vigilancia de la Atmósfera Global.
"NO HAY INDICIOS DE UNA DESACELERACIÓN"
Petteri Taalas, secretario general de esta organización , recordó que la última vez que se dieron niveles de concentraciones tan altas de CO2 fue hace entre 3 y 5 millones de años, por aquel entonces “la temperatura era de dos a tres grados más cálida y el nivel del mar entre 10 y 20 metros superior al nivel actual".
El especialista finlandés indicó que “no hay indicios de que se vaya a producir una desaceleración, y mucho menos una disminución, de la concentración de los gases de efecto invernadero en la atmósfera a pesar de todos los compromisos asumidos en virtud del Acuerdo de París sobre el cambio climático”.
