Esta tarde, el movimiento indígena que protesta en Ecuador anunció que asistirá al "diálogo directo" propuesto por el presidente Lenín Moreno, en busca de una salida a la crisis que desataron los ajustes económicos pactados con el FMI.
La organización reconsideró su negativa inicial y aceptó discutir "la derogatoria o revisión del decreto" sobre las reformas económicas, tras más de una semana de protestas que dejaron cinco muertos y casi 2 mil heridos y detenidos.
El viernes, Moreno consideró "indispensable frenar la violencia" e invitó a los nativos a "encontrar soluciones", esto, frente al llamado de la dirigencia a radicalizar las protestas tras el fracaso de una primera tentativa de acercamiento.
El movimiento indígena dijo que la propuesta del Ejecutivo carecía de "credibilidad", insistiendo en que solo se sentaría a conversar "cuando se derogue" el decreto que eliminó subsidios y encareció los combustibles en hasta 123%.