Los científicos advierten que el cambio climático y los efectos del calentamiento global amenazan con eliminar irreversiblemente las poblaciones de los osos polares.
Según el informe especial del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU, los números de ejemplares de esta especie están en continuo retroceso a medida que su hábitat desaparece.
Con el pasar de los años las temperaturas siguen aumentando, lo que provoca el descongelamiento del hielo marino del que los osos dependen para cazar, obligándolos a pasar más tiempo sobre tierra firme y a recorrer largas distancias en busca de alimento, e incluso a aventurarse por necesidad a entrar a asentamientos humanos.
La población de osos en la bahía de Hudson, en Canadá experimentó una disminución del 30% en el periodo de 1987 a 2017, a consecuencia de la prolongación de las temporadas en las que no hay hielo, según señaló la organización Polar Bears International.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza nombró al oso polar como una especie "vulnerable". Además del cambio climático, enumera otros factores que se sumarían a la perturbación del hábitat de estos mamíferos, tales como la contaminación industrial, la explotación del petróleo y la apertura de rutas de transporte en el Ártico.
Actualmente hay alrededor de 23 mil osos polares en todo el mundo. Pero sin acción sobre el cambio climático, podríamos ver una disminución drástica en el número de osos polares a mediados de siglo.