El atentado en las Torres Gemelas en la ciudad de Nueva York aún acumula víctimas. Hasta la actualidad siguen apareciendo casos de personas que han desarrollado cáncer a causa de la nube tóxica que cubrió el sur de Manhattan por semanas.
El trágico suceso que ocurrió hace casi 20 años dejó como consecuencia alrededor de tres mil fallecidos, más de seis mil heridos y aún no se detiene la cifra de personas enfermas de cáncer y otros males graves.
No solo los rescatistas se vieron afectados, personas de a pie y otros ciudadanos que trabajaban o vivían en los alrededores también son víctimas de la terrible humareda que liberó sustancias cancerígenas como amianto, dioxinas, y más.
Cerca de cuatro mil de ellos han sido diagnosticados de cáncer, entre los tipos más comunes está el de próstata, seno y piel. Y aunque es imposible que se determine que el atentado del 11-S sea la causa exacta, sí es factible afirmar que el riesgo aumentó hasta en un 30% en las personas que estuvieron expuestas.
La cifra, además, se incrementará en el futuro, ya que el envejecimiento de las personas también es un factor que propicia el desarrollo de la mortal enfermedad.