El mandatario norteamericano se negó a realizar un viaje oficial a Dinamarca ante la respuesta de la primera ministra a no estar dispuesta a debatir la venta o no de Groenlandia a Estados Unidos. Así lo escribió en sus redes sociales.
“Dinamarca es un país muy especial con gente increíble, pero en base a los comentarios de la primera ministra Mette Frederiksen, de que no tendría ningún interés en debatir sobre la compra de Groenlandia, pospondré nuestra reunión prevista para dentro de dos semanas para otro momento. La primera ministra ha sido capaz de ahorrar una buena cantidad de gasto y esfuerzo tanto a Estados Unidos como a Dinamarca siendo tan directa. ¡Le doy las gracias por ello y espero poder volver a agendar la cita en algún momento futuro!”, publicó.
Al parecer el gobernante norteamericano estaría muy interesado en adquirir esta región rica en recursos naturales y con un importante valor estratégico para Estados Unidos.
Trump había confirmado su interés en este espacio el cual consideraba “un gran negocio inmobiliario”, pero aclaró que no es un asunto que esté en primer plano. Ese mismo día, la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, fue enfática al decir que “Groenlandia no está en venta. Groenlandia no es danesa, es groenlandesa. Espero de verdad que no sea nada que se haya dicho en serio”, concluyó.