Las autoridades alemanas hallaron 4,5 toneladas de cocaína en un barco contenedor procedente de Uruguay, cuyo destino final era la ciudad belga de Amberes.
Cuando personal de aduanas de Hamburgo abrió el vagón, halló 211 bolsos deportivos negros, en los cuales había 4.200 paquetes de cocaína, de la más alta pureza.
El costo de reventa en la calle de la cocaína incautada llega a los 1.100 millones de dólares. El mercante uruguayo, según su documentación, transportaba semillas de soja.
La cocaína, que fue incautada hace dos semanas, ha sido destruida ya bajo estrictas medidas de seguridad y riguroso secreto, señala el comunicado de aduanas.
El mayor alijo de droga hasta ahora hallado en Alemania fue de 3,8 toneladas de cocaína en 2017.