Un estudio de la Universidad de Valencia, dirigido por la doctora Pilar Codoñer Franch, del Departamento de Pediatría, Obstetricia y Ginecología, asegura que la cerveza es capaz de combatir el envejecimiento de manera más eficaz que las cremas antiarrugas.
De acuerdo con la investigación, los antioxidantes de la cerveza combaten de manera muy efectiva a los radicales libres, las moléculas responsables del envejecimiento de la piel.
La cerveza contiene una gran cantidad de polifenoles, un grupo de antioxidantes naturales que también se encuentran en frutas y verduras. Además, el elixir amarillo contiene vitamina B y ácido fólico B1, B2 y B3.
Los radicales libres, responsables de nuestro envejecimiento, atacan las células vivas, lo que provoca que nos oxidemos: más arrugas, huesos débiles, falta de hidratación. Asimismo, este descubrimiento asegura que la cerveza ayuda a combatir estos dañinos radicales libres.
Codoñer Franch sostiene, además, que los antioxidantes provenientes de la cebada horneada que contiene la cerveza y las características sensoriales de esta bebida (aroma, textura y color) ayudan a interactuar con las proteínas y azúcares responsables de la aparición de compuestos que inducen la formación de radicales libres.