Una nueva escalada de violencia en Siria. Al menos 30 personas, entre ellas 13 niños, murieron durante un nuevo bombardeo lanzado por las fuerzas del régimen de Bashar Al Assad, en el último bastión Idlib.
Por su parte la Organización de las Naciones Unidas (ONU) indicó que los combates han obligado a más de 270 mil personas a desplazarse hacia otras zonas para salvaguardar su vida ante los recientes ataques.
Cabe resaltar, que la ofensiva contra los insurgentes de la localidad de Kafr Nabuda, ha cobrado la vida de 864 personas, entre ellas 285 civiles incluyendo 68 niños, desde el 30 de abril hasta la fecha.