Esta mañana, 16 personas murieron durante un enfrentamiento entre militares y grupos terroristas, sospechosos de haber participado en los sangrientos atentados del Domingo de Resurrección, que dejaron más de 250 muertos y 500 heridos, según cifras oficiales.
En la operación de hoy murieron seis niños, tres mujeres, un civil y seis terroristas, además de causar cinco heridos, confirmó el Gobierno de Sir Lanka, que precisó que "no hubo bajas dentro de las tropas", en referencia a las Fuerzas Armadas.
El operativo de esta mañana en la ciudad oriental de Kalmunai, se ejecutó tras un aviso de la existencia de una casa donde se ocultaban personas vinculadas con los atentados a iglesias y hoteles de lujo, lo que desencadenó un tiroteo y una serie de explosiones.
Las muertes se produjeron, de acuerdo a las autoridades, cuando los suicidas, al verse vencidos, detonaron los explosivos que tenían en la vivienda matando a sus propias familias.