Por mucho que cueste admitirlo, a veces parece que hubiera algo de razón en el discurso de ciertos animalistas cuando dicen que entre los animales, el ser humano es el único que puede ser considerado ‘malo’.
Los animales no tienen conciencia ni pensamientos como los humanos, solo se dedican a sobrevivir y cumplir su función natural (a diferencia de los humanos) y, de hecho, cuando discutimos si un animal es ‘malo’, nocivo o dañino, siempre veremos que los humanos, directa o indirectamente, hemos sido responsables de la situación.
Uno de esos innumerables casos es el del perro pitbull, una raza que hoy es satanizada y catalogada de agresiva por muchos, sin saber que fueron precisamente los seres humanos quienes buscaron desarrollar su físico y temperamento temible para la pelea.
En realidad todo depende, como repiten constantemente los expertos, de la crianza que se le da al animal, algo que muchas veces queda de lado por amos negligentes y, sobre todo, cuando aún existen sujetos interesados en usar a estos animales como armas o entretenimientos sangrientos.
El 30 de diciembre un caso terrible hizo noticia en Florida, Estados Unidos, cuando ‘Scarface’ (Caracortada), el pitbull que era la mascota de una familia, atacó brutalmente a sus amos luego de que Brenda Guerrero (52) lo estresó intentando demasiadas veces vestirlo con una prenda navideña.
El perro atacó a la mujer, y luego al esposo de ésta, Ismael Guerrero, quien acudió en su ayuda. La horrenda situación solo se detuvo cuando el hijo de ambos, Antoine (22), apuñaló al poderoso animal en la cabeza y el cuello para debilitarlo, tras lo cual huyeron, encerrándolo en el patio.
Posteriormente, el Servicio de Control de Animales lo sedó con dardos tranquilizantes y lo llevó a un recinto seguro. Aunque la familia no resultó con heridas severas, las autoridades vieron que la actitud del can era agresiva, habiendo resistido hasta el disparo de una pistola Taser.
Lamentablemente las últimas noticias que llegaron de este hecho fueron que, debido a su comportamiento peligroso y a las graves heridas que sufrió al ser apuñalado, el pitbull tuvo que ser sacrificado.
Parte de tener una mascota es el de aceptar a los animales como lo que son, con su propio carácter y naturaleza. Cuando olvidamos esto, las consecuencias pueden ser tan trágicas para nosotros como para ellos, que a fin de cuentas son los más indefensos e inocentes.
