Hace unas semanas informamos acerca de la curiosa pero tierna noticia que protagonizó el Mall of America, el centro comercial más grande de los Estados Unidos, que decidió presentar a su primer Santa Claus negro en Bloomington, Minnesota.
Y aunque ciertamente se puede entender que se trata de un gran cambio en una fiesta tradicional y puede haber muchos ‘puristas’ a los que se les haga difícil asimilar la idea, nada justifica la ola de odio y racismo que se desató en las redes sociales.
Larry Jefferson había declarado a la televisora WCCO que su trabajo en la empresa The Santa Experience en el mall no era “gran cosa”, afirmando que “aún soy Santa, solo que de color”. “Santa sigue siendo solo santa. Los niños son muy inocentes, ellos simplemente aman a Santa”, añadió.
Como sea, las reacciones que suscitó este hecho en las redes de Estados Unidos fueron de todo, menos inocentes. En la misma página de la WCCO podía leerse desde burlas con tinte racista hasta un llamado directo a boicotear al Mall of America cargado de odio, entre insultos irreproducibles.
Según informó RAW Story, medios como The Star Tribune decidieron inhabilitar los comentarios. El editor Scott Gillespie informó de este hecho vía Twitter, mientras el autor del artículo informó que esto es una práctica común “en artículos que comprenden asuntos raciales”.
En la red de microblogging el asunto fue a mayores, mezclando asuntos políticos y hasta apologías de crímenes. Sin embargo, como contrapeso, también hubo varios comentarios en Twitter que, ya sea abiertamente o en tono sarcástico, apelaban a la razón.
Entre los más destacados estuvo el escrito por el actor de origen japonés de Star Trek, George Takei (79), quien fue internado en un campo de concentración estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial y recordó con ironía que en el lugar donde estuvo, Santa “era asiático”.
The Santa Experience, negocio que permite a los niños vivir la magia de conocer a Papá Noel en persona, continuará recibiendo a su público hasta el 24 de diciembre. Sin embargo, como fue planeado desde un principio, Jefferson, el primer Santa negro, solo estuvo el 3 y 4 de diciembre.
