Un equipo de científicos del laboratorio Alkahest ha descubierto la posible fuente de la eterna juventud. Los expertos han diseñado una nueva técnica que consiste en usar el plasma sanguíneo de personas jóvenes para rejuvenecer a ratones viejos.
Para realizar el estudio, los científicos de la compañía de investigación tomaron muestras de sangre de humanos de 18 años de edad, e inyectaron el plasma dos veces por semana en ratones de 12 meses.
Cuando cumplen un año, su edad equivalente es 50 años en humanos. Aquí empiezan con síntomas de envejecimiento, deterioro de la memoria y una menor actividad física. Sin embargo, con el experimento mostraron mejoría en la memoria, cognición y la actividad física de los roedores.
El equipo de científicos cree que su descubrimiento tiene potencial para convertirse en un tratamiento para pacientes humanos, que sufren enfermedades degenerativas como Alzheimer.
