Kayden Culp, quien tiene apenas 10 años y tiene necesidades especiales, fue atacado por 10 compañeros de su escuela, quienes no dudaron en prenderle fuego arrojándole gasolina.
El terrible hecho ocurrió en la localidad Texana de Kerrville, en Estados Unidos. Entre los testigos se encontraba la tía de la víctima, Kelly Mac, quien declaró que Kayden estaba jugando en un campo con otros dos niños cuando estos lo rociaron intencionadamente con gasolina y le prendieron fuego.
Los padres aclararon que su hijo siempre ha sufrido bullying en la escuela; pero que esta vez han llegado demasiado lejos y exigen que se haga justicia, aplicándole las penas máximas a los dos agresores; a pesar de que se traten de unos niños.
