En Tailandia, un hombre fue atacado por una enorme serpiente pitón de más de tres metros de largo durante aproximadamente media hora. Lo curioso es que el impactante episodio no ocurrió en el campo sino en el baño de la casa del sujeto identificado como Attaporn Boonmakchuay, cuyos genitales llevaron la peor parte de dicho ataque.
Todo hace indicar que la serpiente pitón que se deslizó a través del desagüe de su casa y se aferró a su pene, soltó a su presa cuando la esposa de la víctima amarró una cuerda alrededor de la cabeza del reptil. Sólo así Attaporn logró abrir las fauces del peligroso animal. "Sentí como si me hubiesen cortado el pene", le dijo el hombre de 38 años al diario Bangkok Post.
Trabajadores de emergencias desmantelaron el inodoro de estilo asiático, con la pitón aún enroscada a lo largo del mismo. La serpiente fue retirada e iban a ponerla en libertad nuevamente, según un rescatista citado por el periódico Thai Rath.
"Tiene una actitud realmente buena. Su esposa e hijos estaban en pánico. Él ha estado sonriendo y ofreciendo entrevistas desde su cama", señaló el director del Hospital Chularat, Chutima Pincharoen.
