Una fosa común con cadáveres de cuarenta personas, decapitadas por el grupo terrorista Estado Islámico fue hallada en la ciudad monumental de Palmira por los grupos de Defensa Nacional.
La agencia de noticias oficial siria, SANA, informó que los restos presentaban signos de torturas y que entre ellos estaban incluidos tres menores de edad y cinco mujeres.
Los milicianos e ingenieros del Ejército sirio encontraron la fosa cuando llevaban a cabo labores de ‘peinado’ en el barrio de Masaken al Yahizia.