
Una nueva explosión se produjo en un depósito de Tianjin, la importante ciudad portuaria en el norte de China, a solo dos meses después de otras detonaciones que provocaron más de 160 muertos en la zona.
Autoridades locales indicaron que la detonación ocurrió en un almacén de materiales inflamables y se inició un incendio. Ellos señalaron que en el lugar estaban almacenados 3.000 kilogramos de alcohol.
Asimismo, indicaron que no se reportaron víctimas y que este incidente no representa un peligro a la gente o al medio ambiente.